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Textos
Comprobar empíricamente es hacer decir a una cosa desde una particular forma de ver el mundo.
Comprobar implica acercarse a dicho fenómeno desde una perspectiva particular, que en ningún caso lo agota o abarca.
Que el fenómeno responda a dichas operaciones no implica que lo abarque. Un fenómeno puede responder positivamente a distintas comprobaciones.
En la comprobación unimos sentido y materia, volvemos a la dimensión dónde espíritu y materia están unidas.
No es cualquier sentido, no es cualquier significado. Dicho sentido es inseparable de un territorio específico y de una comunidad humana específica.
Sentido que le es propio al fenómeno en el encuentro con la mirada humana.
Por esto es interesante hablar de forma. Las formas implican lo particular del fenómeno.
Las cosas tienen formas específicas, para un observador específico. Las formas de las cosas son lo espiritual.
El conocimiento humano no necesita ser trascendente
El sentido o conocimiento que se puede encontrar es un sentido para los humanos, no trasciende la mirada humana, ni tampoco necesita trascender la dimensión humana.
Para que querrían los humanos un conocimiento extra humano?
Eso es querer hablar por las cosas.
El conocimiento parcial, inseparable de quien mira y su contexto, es suficiente para la vida humana.
Lo espiritual no es algo imperceptible, hablar de algo imperceptible no tiene sentido.
Lo espiritual puede ser menos evidente pero se refiere a lo sutil o tenue.
Lo espiritual es lo que no puede observarse directamente en la vista como un objeto independiente.
Si bien puede reconocerse indirectamente en sus efectos, en sus comportamientos, en cómo da forma o estructura a ciertas cosas.
Lo espiritual es lo no individualizable, es una parte de lo perceptible. El ser silla de una silla no está en ninguna parte de una silla como algo reconocible independientemente.
Solo puede reconocerse como una cualidad general de la silla de la relación de sus partes.
Es imposible negar que reconocemos la silla en la silla, sin embargo no podemos separar de sus partes aquello que la hace silla.
El arte investiga las formas El arte es capaz de investigar y conocer la forma de las cosas.
Esto lo hace mediante habilidades humanas que han sido relegadas en nuestro presente por el énfasis cientificista.
El arte puede conocer distintos elementos vinculándose con ellos mediante estrategias no definidas.
Lo que hoy distingue al arte de una práctica científica mal entendida es que no necesita ni pretende ejercer una manera de hacer con el fenómeno que sea la única manera, ni que entregue una única visión de el.
El arte es una práctica espiritual en tanto trabaja con las formas de las cosas.
Las formas son la manera en que se comportan los fenómenos.
Esta manera de comportarse corresponde a la dimensión sutil o tenue, que no puede explicarse por sus componentes materiales solamente,
sino que aparece más bien como un orden que requiere no solo las capacidades de observación sino también las capacidades inventivas racionales humanas que relacionan los elementos.
Lo espiritual es lo que el ser humano es capaz de conocer desde la integridad de sus sentidos.
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