Victor Salas

El dictador Augusto Pinochet lideró el "Golpe de Estado" que derrocó al gobierno del presidente Salvador Allende, el 11 de septiembre de 1973.

Durante los años que gobernó, disidentes chilenos fueron detenidos, torturados, asesinados o exiliados, dejando a más de 3.000 víctimas muertas o desaparecidas a manos de agentes del Estado.

Más de 37.000 opositores al régimen sufrieron prisión política y tortura, otros 300.000 fueron exiliados.

Augusto Pinochet falleció sin haber sido condenado nunca y el Ejército chileno no aportó nunca a esclarecer los crímenes realizados durante la dictadura.

Muchos de los violadores a los derechos humanos que fueron condenados, encarcelados en prisiones hoteles y tratados como huéspedes, gozando de atenciones especiales a las que ningún reo ordinario puede acceder y conservando sus ostentosas pensiones como militares.

Los ex-funcionarios de fuerzas armadas que participaron de violaciones de derechos humanos siguieron trabajando y ocupando altos mandos institucionales, otros fueron jubilados con altos honores y millonarios sueldos, viviendo libres impunemente falleciendo millonarios.